La noche fue movida, parece que hubo bastante juerga por las habitaciones, pero curiosamente, no sabemos cómo, cuando te acercabas a la puerta se hacía un silencio abrumador (la magia de Corporales, supongo).

Acorde con la noche, tuvimos muchos madrugadores y antes de las 9 estábamos en la Iglesia para empezar todos juntos el primer día completo de campamento.

Nos estrenamos en los deportes, dónde han puesto toda su energía enfrentándose a los otros equipos, nos han regalado un espectáculo de profesionalidad, trabajo en equipo, fuerza e inteligencia. Después del sofocón, empezaron las novatadas y con ello, un buen manguerazo que nos dejó bien fresquitos (tranquilidad, esto no cuenta como ducha).

En catequesis hemos aprendido un concepto nuevo «pobres de espíritu», que aunque nos ha costado un poco entenderlo al principio, ha sido muy bonita basada en la generosidad y en el darse por completo a los demás.

También hemos dado el pistoletazo de salida a los talleres, hoy nos hemos adentrado en el mundo del yoga y la meditación. Aunque para algunos ha sido una hora de siesta…

Por la tarde estrenamos el tablero del CATÁN y nos lanzamos a la aventura, como grandes exploradores en la búsqueda de la recogida de los materiales más valiosos de la zona de Corporales. Con ellos, hemos podido construir en la velada tantos puentes y casas como eran necesarios para terminar la carrera cuánto antes, ha sido SUPER INTENSO!!!!

Ahora ya nos despedimos, con la mente puesta en el día de mañana, sabiendo que si cabe, será mejor que el de hoy.
Un abrazo desde León.

Pd: Las fotos las iremos subiendo a lo largo de la mañana.